Arman
Francia, 1928–2005
Armand Pierre Fernandez prefirió llamarse Arman. Perteneció a ese grupo de vanguardia de los 60 llamado Nuevo Realismo, junto a otros modernos como Yves Klein y demás gente supercool de la nouvelle vague que promulgaron «nuevo enfoque perceptivo de lo real».
Arman en concreto se dedicó a las acumulaciones: a agrupar cosas del mismo tipo, desubicadas de su lugar natural y presentadas en conjunto. No manipulaba estos objetos en absoluto. Simplemente los amontonaba, muchas veces casi embutidos.
Dicho de otra manera, Arman acumulaba basura.
Este Síndrome de Diógenes artístico puede tener mucho que ver con ese encontrar y colocar objetos propio del dadaísmo, pero según Arman, en estas acumulaciones no entra para nada el azar sino que pretenden ser un reflejo calculado de nuestra sociedad consumista, una sociedad de usar y tirar, algo que también reflejaría, aunque de otra manera, el Arte Pop.
También pasaron a la historia del arte universal sus cóleras, que consistían simplemente en destrozar ese horror vacui previamente creado por el artista para retratar esa mezquina mentalidad consumista de la decadente sociedad de la época. Consumismo que el irónico Arman por supuesto abrazó… Sus obras alcanzaron sumas ridículas en el siempre dadaísta mercado del arte.