Ithell Colquhoun
Reino Unido, 1906–1988
Ithell Colquhoun (pronuncien ustedes su nombre como buenamente puedan) fue una pintora —y poeta— británica asociada al Surrealismo.
Nacida en la India colonial, Colquhoun se crió en el Reino Unido, donde estudiaría en colegios pijos para señoritas. Ahí entraría en contacto con las dos cosas a las que le dedicaría su vida: el ocultismo (después de leer a Aleister Crowley) y el arte.
Al no pintar mal, en los años 20 inició sus estudios de arte, aunque fue principalmente una artista autodidacta. Ganó algún que otro premio y viajó a París, donde se toparía de narices con el Surrealismo, y a Grecia, donde inció una tórrida relación lésbica con una mujer, Andromache «Kyria» Kazou, con la que convivirían una temporada.
Tras ver una conferencia de Salvador Dalí, Colquhoun se asoció cada vez más con el movimiento surrealista en Gran Bretaña, y cuando visitó a André Breton en París en 1939, se unió al Grupo Surrealista Británico en el mismo año, pero sería expulsada en 1940, debido a su negativa a cumplir con las demandas que exigían que los surrealistas no deberían ser miembros de ningún otro grupo. Ella continuó siendo surrealista, pero a su manera.
Ithell Colquhoun utilizó en su obra técnicas automáticas, exploró el subconsciente, se interesó por la biología (plantas y flores fueron un tema recurrente en su arte) y exploró a menudo conceptos sobre sexo y género.
Retrató a mujeres poderosas de mitos e historias bíblicas (quizás influenciada por Artemisia Gentileschi) y habló de temas de castración e impotencia masculina, dejando dibujos que muchos calificaron de «siniestros».