Robert Campin
Francia, 1379–1445
Robert Campin fue un pintor primitivo flamenco… Y poco más podemos decir del artista. Se desconocen casi todos los datos biográficos sobre él. Nos quedan, esos sí, sus espectaculares obras de arte.
Sabemos que tuvo encargos de particulares y gremios, así como de autoridades eclesiásticas y cívicas. Pudo así vivir bastante bien con su oficio. Campin era dueño de varias casas, compró bonos de la ciudad e invirtió en hipotecas. Se habla también de adulterio. Campin estaba casado con Ysabel de Stocquain, pero tuvo una aventura con Laurence Polette, por lo que fue procesado en 1432 y condenado a un año de destierro.
Campin fue capaz de llevar la pintura a un realismo inédito hasta entonces. De los primeros artistas en experimentar con óleo (en vez del típico temple usado hasta entones), así pudo dedicar más tiempo a la técnica de la pintura antes de secarse. Sus obras consiguieron así un acabado mucho más detallista, brillante y naturalista que las que se realizaban hasta entonces. Robert Campin fue pues, un innovador, un revolucionario.
Se dedicó, como era normal en la época, al arte religioso. Pero en su producción podemos encontrar también retratos (por fin el individuo importaba, concepto clave en el Renacimiento), y varias escenas cotidianas. De hecho, su arte religioso también incorpora como novedad la introducción de escenas domésticas.
Junto a Jan van Eyck fue el primer pintor que se alejó del Gótico para empezar algo completamente nuevo.