Giotto
Italia, 1266–1337
Giotto di Bondone se cargó el arte medieval e inició una de las etapas de mayor esplendor del arte universal: el renacimiento, cuando tal concepto era impensable. Semejante innovación fue aplaudida por sus contemporáneos y seguramente no fue quemado por brujo en la hoguera por el cariño que le profesaba el pueblo italiano, ya que en su tiempo gozó de una fama inmensa.
Es quizás el artista más revolucionario de esta web y uno de los mejores pintores de todos los tiempos.
Giotto fue de los primeros en dar volumen a las figuras y buscar la perspectiva. Sus arquitecturas son otra de sus características, integrándolas en la escena. Y da igual que en los tiempos de Cristo no existiera la arquitectura gótica… El artista pintaba edificios contemporáneos. Recordemos que (como buen renacentista) también era arquitecto.
Es posible que Giotto adoptara el lenguaje visual de la escultura para dar volumen y peso a sus figuras. Para la época, eran verdaderos milagros del naturalismo. Sus vírgenes parecían estar vivas, y no sólo por su excepcional conocimiento de anatomía y poses naturales, sino por captar las emociones como nunca antes se había visto.
Vasari, el biógrafo del renacimiento, cuenta que Giotto era muy divertido y un auténtico bromista. Una vez pintó una mosca en la nariz de un retrato de su maestro Cimabue y este se pasó un tiempo intentando espantarla con la mano.