Eugène Jansson
Suecia, 1862–1915
Eugène Fredrik Jansson fue el más reconocido pintor del simbolismo en Suecia. Entre su obra destacan los paisajes azules con los que se empezó a conocer al artista como blåmålaren (el pintor del azul) y sobre todo sus desnudos masculinos a los que se dedicó casi exclusivamente en los años finales de su carrera.
Jansson nació en el seno de una familia humilde, pero donde le inculcaron el amor por las artes. Debió funcionar, pues el joven Jansson empezó la carrera de Bellas Artes en Estocolmo. Empieza en esos primeros años a pintar sus vistas nocturnas, unos paisajes azules iluminadas por este color, en los que el pintor plasma las vistas de Estocolmo y su archipiélago. Estos paisajes fueron titulados Nocturnos, en honor a Chopin, su gran ídolo.
Otra faceta conocida de su pintura fueron temáticas sociales, tendiendo a lo proletario. Jansson fue un ferviente socialista. Y Jansson era además gay, algo inconfesable en la Suecia de la época (la homosexualidad fue ilegal en este país hasta 1944). En 1904, con los nervios a flor de piel por vivir dentro de un armario, Jansson empieza a canalizar su frustración pintando tíos en pelotas.
Son cuerpos masculinos muy atléticos, normalmente sacados de hombres jóvenes que encontraba en los baños públicos de la Marina y a los que invitaba a su taller. Se aprecia en estos cuadros una influencia cercana a Van Gogh e incluso a su vecino Munch y sus modelos masculinos.