Gaetano Zumbo
Italia, 1658–1701
El sorprendente Gaetano Zumbo fue un escultor de cera del Barroco italiano especializado sobre todo en representar la descomposición del cuerpo humano. Por ello, llevó los estudios de anatomía humana a otro nivel, y más que artista (que lo era, vaya si lo era), casi hasta se puede considerar un científico.
Zumbo fue un monje en Siracusa bastante interesado en la medicina que se convirtió en artista autodidacta jugueteando con la cera. En un punto, las figuras que creaba con este material eran de un realismo y expresividad inéditos.
Los nobles rápidamente apadrinaron al escultor y patrocinaron sus obras, que a veces eran religiosas, y otras cuerpos humanos en proceso de descomposición dignos de Halloween. Muertos en distintos estadios, desde el moribundo reciente al cuerpo ya corrompido y comido por los gusanos.
Sus representaciones anatómicas en cera llamaban la atención por su naturalismo extremo, y eso en el Barroco era muy apreciado. Muy pronto, empezó a crear complejas composiciones con estas figuras. Micro-teatros en los que amontonaba muñequitos de cera que interactuaban y parecían vivitos y coleando. Incluso los cadáveres.
Escenas macabras, que fueron muy bien vistas tanto a nivel científico como a nivel artístico. Sus ceras de colores, perfectamente combinadas llegaban a un realismo perturbador y una exactitud científica inéditos hasta esa época.
Lógico que en sus últimos años, acabara dejando de lado el arte para codearse con cirujanos y científicos para los que confeccionaba maniquíes con la representación de músculos, venas, arterias, glándulas y demás interiores del cuerpo humano.