Hendrick Goltzius
Países Bajos, 1558–1617
Hendrick Goltzius, uno de los representantes del Manierismo Nórdico y considerado el mejor grabador de los Países Bajos, empezó a pintar muy tarde.
Goltzius nace en la actual Renania del Norte-Westfalia (Alemania). Su padre era artesano de vidrio y el joven Hendrick aprendería sus primeros pasos en el arte con su viejo, pintando sobre vidrio. Más tarde se iría a Haarlem y se introdujo en el grabado, que era lo que le gustaba de verdad.
De muy niño, debido a un incendio, Hendrick quedó con la mano derecha inútil, pero paradójicamente, por tener los dedos lisiados de esa manera particular, manejaba de puta madre el buril, dominando perfectamente las líneas del grabado.
Con 21 años se casó con una viuda rica. Un poco vieja, pero gracias a su pasta Goltzius pudo montar su propio taller.
Tras un viaje a Italia para librarse de la parienta unos meses, Goltzius descubrió a Miguel Ángel y adoptó su estilo, importándolo a Holanda. Desarrolló así un Manierismo ornamental, lleno de musculaturas irreales, abigarramiento loquísimo y una estética que no ocultaba un gusto por lo grotesco.
Goltzius era una estrella en Europa. Se le conocía por su mano deforme y los fans lo paraban por la calle. Así vivió, admirado y valorado toda su vida hasta que el nuevo estilo de Rubens barrió con todo.