Dos damas de la familia Cholmondeley
Dos iguales para hoy.
Anónimo
1600Según la inscripción inferior izquierda (afinad la vista y la veréis, o dádle a la opción de HA! «ampliar», que para algo está) esta extrañísima pintura representa a Dos damas de la familia Cholmondeley, que nacieron el mismo día, se casaron el mismo día dieron a luz el mismo día.
La identidad de estas cuatro personas es un misterio, a pesar de quedar documentado el apellido. ¿Son las hijas de Sir Hugh y Lady Mary Cholmondeley? ¿Sus sobrinas…? También al igual que se desconoce el nombre del o la artista que pintó este cuadro. Y eso le da a la obra un toque más enigmático, más misterioso todavía.
Las dos —casi— idénticas madres tienen a dos —casi— idénticos bebés en brazos, con similares encajes y joyas, en la misma posición, envueltos en la misma tela escarlata… Son indistinguibles a simple vista, y sin embargo, si las miramos empezamos a ver diferencias: los colores de los ojos, por ejemplo, tanto de las damas como de los bebés… o los encajes… Y de repente estas dos damas idénticas y sus hijos son muy diferentes.
Como en esa maravillosa foto de Diane Arbus de dos gemelas idénticas, si le damos tiempo, a veces lo parecido no puede ser más diferente. Y si nos fijamos bien, poco a poco, pequeñas diferencias se convierten en verdaderos abismos.
En este cuadro de ese bizarro Manierismo de los últimos años, podemos comprobar también lo inquietante que es ser parecidos, esa normalidad en lo extraño y eso extraño que hay en la normalidad… Y esa extrañeza se amplifica con la rigidez de la composición, sin un puto escorzo a la vista. Puro malrrollismo británico.