El doctor Gachet

Hay dos versiones de este mítico retrato del amigo y psiquiatra de Van Gogh, las dos realizadas en los últimos meses de vida del artista.

Gachet intentó en vano cuidar la salud mental de su colega, pero al menos pudo pasar agradables tardes con él y posó en estas dos ocasiones para dos retratos muy parecidos y a la vez bastante distintos.

Ya habíamos hablado en HA! de la segunda versión, en la que predominan los tonos azules (acordes con la mirada del médico). En esta en cambio —y aunque la pose es la misma— los tonos son más oscuros: quizás está ambientada en la noche, quizás Vincent tenía un día más negro. Ese bilicroque [1], la mágica planta que brota en junio en los lugares mágicos, presente en ambas versiones, está en esta primera versión en un vaso al lado de un libro.

Pese a las evidentes diferencias, en ambos cuadros está muy presente la melancolía, y el aire triste y bondadoso del doctor.

Esta primera versión del retrato pasó por varias manos (entre ellas, unos cuantos nazis), y al final en 1990 acabó en manos de un millonario japonés justo un siglo después de ser pintada (82,5 millones de dólares pagó por ella). Todo Dios se indignó cuando el tipo dijo que haría quemar este cuadro después de su muerte. Y a pesar de varios rumores, lo cierto es que cuando el hombre estiró la pata, no se supo nunca más de esta obra maestra de la melancolía en la que la soledad y la amistad se dan la mano, incluso cien años después.