Entrada al Gran Canal
Las postales como esta arrasaban en la época.
El vedutismo fue ese estilo pictórico del XVIII que retrataba estampas urbanas de Venecia, es decir, postales de la ciudad. Todo un subgénero del rococó al que es imposible no relacionar con Giovanni Antonio Canal, alias Canaletto.
Canaletto pintó la Venecia moderna, esa que no oculta su glorioso pasado y en la que empieza a explotarse la industria del turismo (sobre todo ingleses), aunque su prosperidad no era tanta como aparentaba. Después de todo estamos ante una de las ciudades de las máscaras.
La pintoresca ciudad tenía de todo: belleza de día y emociones fuertes de noche. Durante unos años le robó el trono a Paris de la capital del romanticismo.
Y claro… ambientes así atraen todo tipo de artistas. El turismo aristocrático supuso para la pintura un buen medio para hacer dinero y negocios y el joven y talentoso Canaletto vio una oportunidad de ganar unas monedas.
La luz radiante, un gran dominio de la perspectiva y sus típicas y tópicas figuras venecianas volvieron locos a sus clientes ingleses, que lo encumbraron a status de estrella de rock and roll. Poco después, en el Reino Unido nacería el romanticismo, y quizás la idea de lo pintoresco, lo digno de ser pintado, le debe algo a esa fiebre de Canaletto.