Zorros
Al ir aumentando el mosaico, de estas cabezas de zorro surgen motivos vegetales y florales.
Este azulejo modernista se compone de cuatro cabezas estilizadas de zorro y un círculo central.
Pero como podéis comprobar si vais construyendo el mosaico, a partir de las cabezas de zorro van surgiendo motivos vegetales y florales. Una geometría basada en la naturaleza que fue muy del gusto modernista, con sus típicas curvas orgánicas y agradables pliegues, y la fuerte estilización de los motivos.
Para el modernismo o Art Nouveau (o Jugendstil en Alemania, de donde era Eckmann) las artes tenían todas igual importancia, tanto las llamadas artes mayores (pintura, escultura y arquitectura), con las menores, aplicadas o decorativas (artes gráficas, tipografía, muebles, relojes, joyas, cerámicas, lámparas… o un azulejo).
Los modernistas eran artistas «integrales» que tanto diseñaban un edificio como los picaportes de sus puertas, y para ellos las dos cosas tenían el mismo valor.
La empresa de cerámica Villeroy & Boch encargó a Eckmann esta obra de arte cumpliéndose otra de las características del modernismo: fabricar objetos cotidianos con alto valor estético y que fueran accesibles a toda la población, aunque sin utilizar las nuevas técnicas de producción masiva que impedían el desarrollo del buen hacer artesanal.
Pues bien. Ahora podéis fabricaros un muro virtual de azulejos Eckmann en vuestra pantalla y sentiros en la belle époque del fin de siècle, cuando en toda Europa estaba floreciendo el nuevo estilo.