Alfonso Sánchez Portela
España, 1902–1990
Alfonso Sánchez Portela nace en 1902 en el madrileño barrio de La Morería. Su padre, el por aquel entonces reconocido fotógrafo Alfonso Sánchez García no solo le dio su nombre a su hijo, sino que además lo introdujo en la profesión como aprendiz en el taller familiar a muy temprana edad. Está claro que hay gente que sabe reconocer el talento.
Pese a la habilidad y capacidades que demostraba en el oficio fotográfico su familia lo empujaba a estudiar, es por eso que «Alfonsito» estudia el bachiller elemental en el reputado Liceo Francés de Madrid. Estos son todos los estudios que realizaría pues al acabar decide abrazar la profesión de su padre y se dedica en cuerpo y alma a ella. A los dieciocho años publicará su primera fotografía y esto lo anima a seguir de un lado para otro a sus más experimentados colegas de profesión: es aprendiz de fotorreportero, un oficio todavía en pañales.
A comienzos de la década de los años veinte su persistencia lo lleva a conseguir la licencia de reportero gráfico y, por suerte o por desgracia, viaja a Marruecos junto al periodista Luis de Oteyza para cubrir una entrevista con el mismísimo Abd-El-Krim que aún a día de hoy nadie se explica cómo se dejó tomar fotos. Poco después también fotografía el brutal desembarco de Alhucemas.
En 1927 realizará un viaje expedicionario también con su colega Luis de Oteyza. Las experiencias vitales de «Alfonsito» y los muchos hechos históricos en los que participó son impresionantes pero sin duda destaca su participación en la Guerra Civil Española durante la cual estuvo en activo permanentemente en el frente republicano. En su álbum encontramos fotografías que ilustran la proclamación de la Segunda Republica Española, el asesinato de Calvo Sotelo, las batallas de Teruel y Madrid, la definitiva rendición republicana… En 1952 se le retira su carnet de informador debido a su participación en el bando leal, por lo que no volverá a ejercer como periodista.
Hablar de la lente prodigiosa de «Alfonsito» es hablar del aspecto de la España del siglo veinte, sus episodios históricos más cruciales, sus momentos críticos y los personajes envueltos en ellos. Muchos de estos personajes como Federico García Lorca o Antonio Machado sabedores del talento de Sánchez Portela se dejaron retratar por el, quien realizó la tarea a la perfección. En 1992 el Ministerio de Cultura Español adquiere su estudio fotográfico de la calle Gran Vía junto a la totalidad de su archivo, conocedor del valor documental incalculable de la obra de «Alfonsito».