Elisabeth Jane Gardner
Estados Unidos, 1837–1922
Elisabeth Jane Gardner fue la primera mujer pintora en recibir una medalla de oro en el mismisimo Salón de París, ese momento histórico sucedió en el año 1872. Se dedicó a recibir clases privadas y creó un buen material artístico para ello, ya qué, hasta 1897 no se levantaría la prohibición de mujeres en la «École des Beaux-Arts». Aún así, demostró con su talento, esfuerzo e ingenio su merecido reconocimiento.
Gardner era una mujer alfa que mostraba osadía ante las adversidades y sabía gestionar y alimentar sus relaciones. Como Rosa Bonheur, solicitó a la policía un permiso para vestirse como un hombre para poder asistir a las clases de «Manufacture nationale des Gobelins».
Gardner no sólo alimentó su pasión sino que también se moldeó para afrontar el camino. En Massachusetts estudió arte e idiomas y aprendió inglés, francés, italiano y alemán. Además, supo contener su propia creatividad mimetizando un estilo parecido al de Bouguereau u otros artistas masculinos. Su pincelada y el encuadre de la obra definían su personalidad. En sus producciones domina el tema religioso, histórico o mitológico.
Su carrera artística le llevó a conocer a su amado, el gran pintor Bouguereau. Se conocieron en la Académie Julian, donde finalmente fue admitida en 1873. Desde entonces su relación fue conocida por todos y, después de 17 años de amor, se casaron.
Sus obras se exhibieron por primera vez en 1868 en el Salón de París, así como, la primera mujer estadounidense que se presentaba. Durante ese mismo periodo, sus pinturas fueron incluidas en 25 galerías de París. Y desde entonces se han seguido incluyendo a nivel internacional.