Erich Heckel
Alemania, 1883–1970
Erich Heckel fue uno de los primeros expresionistas alemanes, miembro fundador (y secretario, y tesorero) del grupo Die Brücke («El Puente»).
Heckel estudió arquitectura en Dresde y trabajó un poco de eso, pero en 1907 decidió convertirse en pintor, pero no un pintor cualquiera… un pintor vanguardista.
Eso implicaba que nadie entendiera un carallo de lo que estabas haciendo. Los miembros de Die Brücke expusieron por aquí y por allá, pero recibieron como mucho críticas tibias. Se llamaron así porque admiraban a Munch y querían tender un puente entre la pintura alemana tradicional y el expresionismo del noruego. El grupo quería sobre todo hacer un arte barato (quería o no le quedaba otra) así que usaron mucho la imprenta, sobre todo el grabado en madera (xilografía), con su acabado rústico, con irregularidades, aristas y bordes afilados.
También les gustaba el arte primitivo como las momias precolombinas o las máscaras africana. De hecho fue el hermano de Heckel quien introdujo al grupo en la escultura africana.
En 1911 Heckel se traslada a Berlín y se ofrece como voluntario cuando estalló la guerra en 1914, aunque fue rechazado por el ejército por ser demasiado viejo, por lo que se metió como médico en la Cruz Roja. Ahí sirvió hasta 1918 en el hospital de emergencia de Ostende, donde al parecer se reunían todos los artistas, literatos y poetas.
Tras la Gran Guerra, entre 1922 y 1924, Heckel pintó en la planta baja del Angermuseum, siendo las únicas pinturas murales que se conservan del Expresionismo Alemán.
En 1937, los nazis lo tacharon de degenerado —como no— prohibiéndole ejercer. Gran parte de su obra fue destruída. Tras la Guerra, Erich Heckel siguió pintando.