Sonia Delaunay
Francia, 1885–1979
Sonia Delaunay-Terk, nacida Sonia Stern, es una de las máximas responsable junto a su marido Robert Delaunay del Orfismo, ese cubismo de colores. Pero Sonia se salió de las bellas artes y aplicó también esta corriente en otras disciplinas como el diseño de moda, de libros, de tejidos… Hasta de coches…
Una de las primeras artistas en comprender realmente el Siglo XX.
De origen ucraniano, pudo estudiar arte en San Petersburgo, Alemania y después Paris. Ahí se metió de lleno en el arte de los post-impresionistas como Van Gogh o Gauguin, que le mostraron el poder de los colores. Poco después Matisse confirmaría que era el color a lo que se quería dedicar.
En condición de inmigrante, para no abandonar Francia, contrajo matrimonio de conveniencia con el marchante alemán Wilhelm Uhde, a través del cual conoció a artistas como Picasso o Braque que le enseñaron la otra gran corriente artística de la época: el cubismo.
Y entre los cubistas había un hombre, Robert Delaunay, con el que tuvo un enamoramiento simultáneo. En 1910 se divorció y se casó con Robert. Un matrimonio-equipo en el que el intercambio artístico entre ambos sería constante. Empezó ahí a hacer su arte simultáneo.
Tras vivir unos años en la neutral España durante la II Guerra, Delaunay acabaría abriendo en Paris una boutique simultánea y colaboró activamente con los artistas de los años 20 y 30, siendo uno de los principales activos de las vanguardias parisinas.
Tras la muerte de Robert en 1941, Sonia Delaunay siguió trabajando y colaborando en la promoción del arte abstracto. Sus diseños en todo tipo de objetos la hizo famosa y admirada. Un símbolo de la verdadera modernidad.
En 1964 fue la primera mujer a la que se le honraba con una exposición en el Musée du Louvre.