Adán y Eva
La quitaesencia del art decó.
Lempicka no sólo pinta con su característica manera estilizada, ecléctica y elegante, sino que ubica a la «primera pareja de humanos» en el mundo contemporáneo (los años 30), sustituyendo el jardín del Edén por la gran ciudad. Sin duda para una urbanita como ella, vivir entre esos rascacielos era el paraíso.
La relación entre la pareja desnuda de este cuadro es evidentemente sensual. Adán parece que va a morder a Eva más que a la manzana.
La producción de Lempicka está plagada de figuras desnudas… Parejas, orgías, escenas de amor, poses sensuales… Nada raro en una hedonista como ella, que vio y participó en más de una situación de esas.
Los cuerpos que pinta están pulidos y brillantes como esculturas, pero esculturas casi metalizadas, como la carrocería de un automóvil.
Y es que de eso se trata el art decó… mezclar elegantemente cubismo, futurismo, renacimiento y demás estilos hasta dar con el toque perfecto de decadencia, glamour y hedonismo.
Nótese que rara vez en la historia del arte se representó a Eva con las uñas y los labios pintados…