Almuerzo sobre un rascacielos

El 20 de septiembre de 1932 alguien saca una foto mítica, icónica y muy representativa de su época. Decimos alguien, porque el autor o autora de la imagen permanece aún hoy en día en el anonimato, como también son anónimos varios de los obreros que aparecen, en su gran mayoría inmigrantes.

Aún así, la foto en blanco y negro es tan popular, tan conocida, tan insigne, que podemos decir que pertenece ya al patrimonio del subconsciente colectivo.

Al parecer, este grupo de operarios están trabajando en la construcción del Edificio RCA (puro art-decó en el Rockefeller Center de Nueva York). Estamos en plena Gran Depresión, y los sindicatos están muy fortalecidos en los Estados Unidos. Vemos que estos once trabajadores hasta tienen su pausa para el almuerzo, aunque desde luego la empresa no destaca por la prevención de riesgos laborales: no vemos ni un solo casco, la gente está fumando y alguno incluso tiene una botella sospechosa en la mano. Lo de estar a más de 250 metros de altura sin arneses mejor obviarlo. Pero un trabajo es un trabajo, dicen, y más en épocas de crisis.

​Además de su innegable valor técnico, histórico (sintetiza en una sola imagen todo un país en una época) y publicitario (no solo promociona una ciudad sino casi también el sector de la construcción), estamos también ante una gran foto a nivel artístico: no se nos escapa la ironía de estar almorzando en semejante lugar como si fuera lo más normal del mundo.