Brujas yendo al sabbath
Ni un miserable cuadro de Falero cuelga en los museos públicos españoles.
Luis Ricardo Falero es un pintor casi desconocido en su país de origen, España. Sin embargo su arte gozó de gran éxito y popularidad en su país de adopción, Inglaterra, además de en Francia y Estados Unidos, donde cuadros como este «Brujas yendo al Sabbath» fueron expuestos en los más importantes museos y galerías de su tiempo.
Siempre cultivando el desnudo femenino del que era un maestro, Falero lo introduce en otra de sus temáticas más típicas: la brujería, algo que también fascinaba a Goya (ver «Vuelo de brujas»).
En esta hipnótica obra, un grupo de mujeres acude a un aquelarre, volando en sus escobas o cabalgando un macho cabrío, todo entre una niebla psicodélica que dota al conjunto de una atmósfera hipnótica.
La imagen omnipresente de la mujer, con sus insinuaciones orientalistas (recordemos que estamos en pleno romanticismo, donde lo exótico era tan interesante como lo sobrenatural) es además subrayada por poses de lo más sugerentes.
Cuadros como este gozaron de mucho éxito en la Inglaterra victoriana, de tan estricta moral, pero a la vez tan interesada en temas esotéricos y relacionados con el ocultismo.