El abrazo
Honor de caballería.
The Accolade es una de las pinturas más conocidas de Edmund Blair Leighton, y resume perfectamente lo que el artista estaba haciendo en esos primeros años del siglo XX: hablar de un pasado ideal previo a la era industrial. Era el final de la era victoriana, pero aún se respiraba ese misticismo y esa nostalgia por tiempos pretéritos.
El tema de la caballería fue cultivado por Leighton en varias obras. En esta en concreto vemos la ceremonia en la que a un señor le están confiriendo el título de caballero. El hombre se arrodilla frente a la reina, que coloca la espada sobre el hombro derecho y después en el izquierdo.
En el nombre de Dios, San Miguel y San Jorge, te concedo el derecho a llevar armas y el poder de impartir justicia.
Eso me recuerda a la nunca suficientemente valorada película Excalibur (1981) de John Boorman, en la que se ven varias escenas de este tipo.
El cuadro de Leighton destaca por su virtuosismo casi fotográfico. La Edad Media es retratada por el pintor con una apabullante minuciosidad llena de detalles casi hiper-realistas: desde el vestido de la monarca a la cota de malla del caballero, pasando por los diferentes rostros de la audiencia que está presente en este «abrazo» o la decoración medieval del salón del trono del castillo.