Mujer con ramas
Son las esculturas de Mueck, como esta "Mujer con ramas", escenas surrealistas protagonizadas por figuras extremadamente reales (Mueck trabaja en cada pelo, cada cana, cada arruga, cada poro de la piel…).
Otro ejemplo del escalofriante hiperrealismo de Ron Mueck.
Esta vez, una mujer carga unas ramas. Es una mujer fuerte, de mediana edad, que lucha con cierto esfuerzo por alzar ese manojo de palos que duplica su tamaño.
La señora está inexplicablemente desnuda (como en muchas otras obras de Mueck) y realiza un trabajo cuyo objetivo escapa al espectador (de nuevo, esa es otra de las características del escultor).
La minuciosidad de los detalles en las esculturas de este artista hace que sus piezas parezcan vivas, pese a estar hechas de silicona, fibra de vidrio y acrílicos. El realismo solo se rompe por las proporciones de la mujer, a pequeña escala, que no hacen sino crear una obra más evocadora.
Son las suyas escenas surrealistas protagonizadas por figuras extremadamente reales (Mueck trabaja en cada pelo, cada cana, cada arruga, cada poro de la piel…).
Sus personajes, como esta mujer, no son simples muestras de habilidad técnica. También nos cuentan algo, son líricos y llenos de vida.