
Ordeñando
Regionalismo total.
Niño ordeñando una vaca de Grant Wood fue pintada en 1932, en plena Gran Depresión. Wood era un pintor de aldea, un ruralista, un abanderado del movimiento regionalista americano frente a todos los demás artistas que producían desde las ciudades. De estos urbanitas, hay quien lo veía como un paleto.
El Crack del 29 dejaría sin sus fortunas a algunos millonarios, pero a quien afectó virulentamente fue a la América rural, cuyas granjas sufrieron caídas de precios, ruina y pobreza. Eso provocó un éxodo masivo a las ciudades para buscar trabajos de mierda. El Medio Oeste americano sufrió amplificada esa ruleta rusa económica que de vez en cuando se vuelve a repetir. Es la magia del mercado.
Sin embargo Wood siempre reivindicó lo rural como el verdadero paraíso, y en HA! no podemos estar más de acuerdo. Si hay una vaca, enormes campos de maíz y alguien que se haga cargo de las tareas, hay esperanza, incluso en esos años 30 de la Iowa profunda.
Vemos a un sonrojado muchacho sentado en un taburete, ordeñando su vaca, que nos da el culo: no quiere salir en la pintura, aunque es claramente el centro de la composición. Al fondo un arquetípico granero rojo, porque mientras hay un tejado, hay esperanza.