Blanco polifónico
Simultaneidad y armonía.
Polifonía: Del gr. πολυφωνία polyphōnía «variedad de tonos».
1. f. Mús. Conjunto de sonidos simultáneos en que cada uno expresa su idea musical, pero formando con los demás un todo armónico. [1]
Klee fue uno de esos pintores (junto a Kandinsky, Gabriele Münter o Franz Marc) pertenecientes a una corriente concreta del Expresionismo Alemán, el llamado Der Blaue Reiter (el jinete azul), que estaban muy interesados en asociar la pintura con la música.
Para Klee, que fue maestro de color en la Bauhaus —además de excelente violinista— ambas artes estaban muy ligadas espiritual y físicamente y consideraba el tiempo y el espacio susceptibles de poseer un ritmo, una tonalidad y una armonía. Entonces, ¿por qué no una polifonía? Como vemos en la definición de arriba, un conjunto de tonos simultáneos que en conjunto forman un todo armónico
Entre 1929 y 1934 Paul Klee pintó 15 obras que contenían en el título el término «polifonía». Debía estar muy interesado en este concepto.
En este caso, vemos un blanco en el centro de la composición y ocho líneas en ángulo que se entrecruzan, se solapan, se superponen y estructuran el conjunto armónico. Así, con simple color, Klee consigue simultaneidad y armonía, equivalentes a la polifonía en música.