Desenredo del cabello
Una fascinante mezcla la de este artista ruso.
Este pintor ruso contemporáneo es una maravilla. Si… contemporáneo. Probablemente mientras lees esto, Andrey estará pintando cuadros como esta maravilla, inspirados en los iconos rusos que mamó en su infancia cerca del monasterio de San Andrónico de Moscú, con lo mejorcito de la pintura rusa de los siglos XV al XVII.
Remnev también tiene un toque constructivista, un regusto quattrocentista y quizás unos ecos prerrafaelitas. También resuenan matices del Art Nouveau y del barroco holandés… Todo junto, podríamos denominarlo Realismo Mágico Ruso, Neobizantino o como queráis denominar algo tan especial, tan único, y a la vez tan universal, tan memorable.
Andrey Remnev es ruso hasta las cachas (se niega a irse de ahí), aunque por supuesto en occidente tiene su público. Nosotros mismos, para empezar. Aunque parezca una estupidez, no es habitual encontrase hoy en día un artista que conozca tan bien la historia del arte y que sea tan moderno siendo precisamente todo lo contrario.
Desenredo del cabello, como bien dice su título, nos muestra a dos mujeres, una de ellas deshaciendo la trenza de la otra, que nos mira con un rostro angelical. Un cordón rojo entre el pelo simboliza algo, estoy seguro, quizás relacionado con lo que hay entre sus piernas. Unos santos ortodoxos ven la escena al fondo, creando otro campo cromático a mayores, porque el cuadro es un juego compositivo extraordinario, un diálogo entre texturas, colores y símbolos.
Una puta maravilla.