Lisístrata
Agrupación de mujeres no-violentas.
A los 20 años el ilustrador Aubrey Beardsley tuvo un éxito enorme con sus dibujos de Salomé de Oscar Wilde. Fue obra de dos dandys, dos decadentes ingeniosos que disfrutaban escandalizando y provocaban a su paso en asombro y la admiración, o bien desprecio y la envidia. Fueron ilustraciones innovadoras, pero también muy escandalosas, y como resultado Wilde fue arrestado y llevado a juicio y Beardsley no sería contratado por más editores, aterrorizados por el poder de cancelación de los moralistas en la Inglaterra victoriana.
Después del escándalo, el único editor que le quedaba a Beardsley era Leonard Smithers, especializado en, por así decirlo, «libros raros», Publicaré las cosas que los demás tienen miedo de tocar
decía Smithers, y resulta que tenía intención de publicar la famosa sátira antimilitarista de Aristófanes, Lisistrata, al parecer más escandalosa a finales del XIX que cuando fue representada por primera vez en el 411 a. C.
Beardsley dio rienda suelta a su creatividad ilustrando esta apología de la paz que cuenta la huelga sexual de las mujeres atenienses para acabar con la Guerra del Peloponeso. Una orgía de pollas erectas, escatología, mujeres defendiéndose de hombres demagogos, erotismo y mucho humor de la Antigua Grecia, dibujada con el delicioso estilo en blanco y negro de uno de los mejores ilustradores de la historia, que moriría de tuberculosis con sólo 25 años poco después de realizar estos dibujos.