Salome

Estos son los 17 dibujos que realizó Aubrey Beardsley para la Salomé de su colega Oscar Wilde. Ambos eran un par de dandys, dos decadentes ingeniosos que disfrutaban escandalizando y provocaban a su paso en asombro y la admiración, o bien desprecio y laenvidia.

Beardsley era un jovencísimo ilustrador que estaba muy de moda en Londres y Wilde no perdió la ocasión de contratarlo para ilustrar la publicación de su obra de teatro. Esto escribió el literato irlandés de su amigo:

Para Aubrey. Para el único artista que, además de mí, sabe lo que es la Danza de los Siete Velos, y puede ver esa danza invisible.

Antes del estreno de la obra, las escandalosas ilustraciones (culos, tetas, stripteases, necrofilia, incesto…) ya le dieron al texto bastante fama. Y tanto Wilde como Beardsley quedaron encantados. En muchos aspectos se estaba quebrando la sociedad mojigata de la época victoriana para entrar de lleno en el ambigüo, caótico, fascinate y experimental siglo XX.

El drama cuenta la historia de Salomé, hijastra de Herodes Antipas, que tras un espectacular baile pidió a su padrastro la cabeza de Juan el Bautista en una bandeja de plata. La mujer fatal estaba realmente enamorada y el santo la rechazó, por lo que la decapitación es por puro despecho. En la obra fue un auténtico escándalo el beso de una ensangrentada Salomé a la cabeza cortada de Juan. Escándalo en París, claro. En la victoriana Londres no se estrenó públicamente hasta 1931.

Aún así, quedaron las ilustraciones, que plasmaban perfectamente lo escabroso del argumento y lo moderno de la temática. Y ese estilo… fijaos en el nivel de detallismo, la composición, la expresividad de algunas de las imágenes. Grandes áreas en blanco o en negro, pequeñas filigranas en tinta… Todo influido, como ya os habréis dado cuenta, por la estampa japonesa.

Con la no menos escandalosa ópera de Richard Strauss, Salomé se convirtió en leyenda. Aquí os dejamos un audio, para escuchar la danza de los 7 velos mientras pasáis las ilustraciones. La combinación Wilde/Staruss/Beardsley os va a volar la cabeza. ¡A disfrutar!