Radiator Building, Noche en Nueva York
O'Keffe pintó muchos edificios de Nueva York.
Entre 1925 y 1929 Georgia O’Keeffe creó una serie de pinturas basadas en los rascacielos de Nueva York. Eran los tiempos del Art Decó y O’Keeffe estaba encantada en la gran ciudad (quedaban lejos los paisajes desérticos de Nuevo México).
Sé que es inusual que un artista quiera trabajar muy cerca del techo de un gran hotel, en el corazón de una ciudad rugiente, pero creo que ese estímulo es precisamente lo que el artista de hoy necesita… Hoy la ciudad es algo más grande, más grandioso, más complejo que nunca en la historia.
La artista quería capturar “la mística de los rascacielos” que simbolizaban mejor que cualquier otro elemento el mundo moderno y en concreto plasmó uno de los símbolos más glamourosos de la ciudad: el Radiator Building, en el corazón del barrio de Manhattan y paradigma de la elegancia de una época previa a la crisis financiera.
O’Keeffe retrata el espíritu del edificio, iluminado contra el cielo nocturno. Las ventanas están iluminadas, nadie parece dormir esa noche en el edificio. Vemos también un haz de luz diagonal, evocando movimiento, y ese humo que recuerda a las futuras flores que pintaría la artista.
El nombre de Alfred Stieglitz, su marido, aparece en neón rojo.
En conjunto, es una reproducción estilizada pero realista del edificio, y al mismo tiempo casi un cuadro abstracto lleno de formas geométricas y colores vibrando sobre la tela.