La matanza de los inocentes
Uno de los cuadros más violentos de la historia del arte. Y es que los pintores barrocos espumaban con este tipo de escenas.
Rubens pintó dos cuadros sobre esta escena bíblica que cautivó a artistas de todas las épocas.
La matanza de los Inocentes es un episodio relatado en la Biblia, aunque sólo en el Evangelio según San Mateo (Mt 2,16–18) que relata cómo Herodes I el Grande mandó ejecutar a los niños menores de 2 años nacidos en Belén al habérsele escapado Jesús, el que todo el mundo profetizó como Rey de los judíos.
Sin embargo la historia más rigurosa, al ser esta la única fuente del hecho, defiende que Herodes I el Grande no debió ser tan mal tipo y todo fue inventado para hacerlo pasar a la historia como un asesino múltiple de niños.
Historiadores de la época como Josefo lo describen como un monarca ególatra y cruel y no escatiman en contar los detalles más oscuros de su persona, pero no mencionan en ningún momento este grotesco incidente.
Sea como sea, artistas como Rubens, sobre todo en el sangriento barroco, vieron aquí un filón para mostrar cuerpos de todas las edades en movimiento y una orgía de sentimientos y emociones. La verdad es que la escenita es bastante brutal y sangrienta.
Rubens, que acababa de venir de Italia, descubrió el arte de un tal Caravaggio y pintó la obra con este nuevo y poderoso estilo, perfecto para plasmar de forma emotiva el dinamismo y usar por primera vez el claroscuro, que se pondría de moda en toda Europa durante más de un siglo.