Habitación de Arles

Lichtenstein reinterpreta una de las obras más conocidas de Vincent Van Gogh, su famosa serie de cuadros de «Habitación de Arlés». Y eso que Lichtenstein y Van Gogh son artistas más bien diferentes…

Estamos ante la típica apropiación Pop (llamarle robo es quizás excesivo), aunque no sabemos muy bien si es un homenaje o una parodia.

En los años 90 a Lichtenstein se le dio por pintar interiores domésticos, y de paso pudo hacer un «homenaje» a uno de los pintores más famosos de la historia del arte. El artista se permite ampliar bastante la magnitud de la obra del postimpresionista (esta son más de 4 metros de ancho!) y vestirla con su estilo.

El pintor Pop actualiza el mobiliario con sillas contemporáneas (esas Cesca B32 de Marcel Breuer) y reemplaza elementos del cuadro original como las camisas de Vincent de detrás de la cama por unas camisas blancas propias de un empresario (hoy manejan ellos el arte, amigos…).

Y por supuesto, como es habitual en Lichtenstein, se utilizan puntos Ben-Day en una pared. También hay líneas diagonales en la otra y onduladas en el suelo (referencia al propio Van Gogh?).

Roy Lichtenstein afirmó que «limpió» la versión de Van Gogh y bromeó que su interpretación sería del agrado del propio Vincent.