Natividad
Natividad estilo piero.
Piero della Francesca pinta esta Natividad justo antes de quedarse ciego, y quizás es por eso que parece inacabada.
Aún así conserva intactos los valores que hicieron de Piero uno de los artistas más sobresalientes del Renacimiento italiano, un pionero que en el Quattrocento consiguió hacer alcanzar el arte a cotas jamas soñadas.
La temática es clara: el nacimiento del Niño Jesús. La Virgen María está de rodillas, con las manos en pose de oración. El bebé está en el suelo, pero ocupa el centro mismo de la composición, y unos ángeles músicos cantan y tocan instrumentos (asumimos que un villancico).
Atrás, vemos las figuras inacabadas: san José sentado, dos pastores y por supuesto, la mula y el buey que no pueden faltar en esta escena.
Ya sabemos que estos dos animales no se citan en los evangelios, pero desde el siglo IV aparecen en imágenes navideñas, acompañando a la Sagrada Familia.
Muchos ven simbologías variadas en estas dos figuras: representan a todas las razas de la tierra, a lo masculino y lo femenino, el bien y el mal… Y también está la leyenda que dice que el buey fue el único que dio calor con su aliento al bebé, mientras que la mula solo se comía paja del pesebre. Por eso fue castigada a quedarse sin descendencia para siempre, y por ello la mula (unión del burro y el caballo) es estéril.