George Grosz
Alemania, 1893–1959
Georg Ehrenfried Groß fue miembro prominente del movimiento Dada de Berlín y después uno de los pintores de la Nueva Objetividad de antes del Tercer Reich.
Quiso ser dibujante de comics, pero en Dresde aprovechó para copiar obras de maestros clásicos, en especial las de Rubens y trabajar como caricaturista en periódicos locales.
Después en París descubre las vanguardias, a Daumier y a Goya, sus otras grandes influencias.
Comienza aquí una progresiva simplificación de las formas, a la vez que empieza a involucrarse en el expresionismo, como el resto de jóvenes pintores alemanes.
La I guerra mundial lo marcó profundamente y esto se ve en su obra posterior. Desde sus dibujos caricaturescos evolucionó a visiones urbanas apocalípticas y retratos de la violencia, en ocasiones muy politizados. Esto acabó denominándose «Neue Sachlichkeit» (Nueva Objetividad) y retrató con gran eficacia la Alemania de entreguerras.
Con la llegada de los nazis, Grosz tuvo el privilegio de ser bautizado como «bolchevique cultural número uno», aunque no pudo disfrutar de ello en su tierra y lo haría desde Nueva York.
Regresaría a Alemania tras la guerra y moriría debido a una caída por las escaleras después de haber estado bebiendo durante toda la noche anterior.