Bat Woman
Vuelo sabático.
La Mujer Murciélago flota en el aire, desnuda, elegante y misteriosa. Extiende sus alas y levanta sus brazos como lanzándonos un sortilegio. Sus ojos brillantes nos hipnotizan. Ya estamos bajo su poder.
El murciélago es animal nocturno, y quizás por eso ella sale de noche, puede que a cazar. Suspendida en esa atmósfera oscura y nebulosa, en un espacio indeterminado casi con un aire de abstracción, hace que la atención del espectador recaiga por completo en la Mujer Murciélago que claramente posee fuerzas ocultas y primitivas dispuestas a someter a hombres y mujeres que se arriesguen a explorar las penumbras.
La Mujer Murciélago, además de una representación gótica de un desnudo femenino típico de Pénot (fue todo un adelantado este artista, casi se podría decir que inventó el concepto de pin-up), se podría ver también como una reflexión de la sexualidad femenina y hasta del empoderamiento de la mujer, casi una metáfora de la libertad de las mujeres al dejar fluir los deseos del inconsciente por medio de su imaginación.
También, por supuesto, ya que era la moda ocultista de finales del XIX, esta es una imagen que transmite perfectamente el atractivo y el poder de lo oculto, de lo secreto, de lo prohibido.