Él desapareció en completo silencio
El universo bourgeoisiano.
En los años 40, Louise Bourgeois realizó un pequeño libro ilustrado con grabados que reflejan su particular universo. Lo hizo para darse a conocer, pero no fue precisamente un éxito en su momento. Nadie entendió, o nadie quiso entender lo que quería decir esta mujer desconocida con sus textos y dibujos, tan crípticos, tan «femeninos»…
Tanto los aspectos visuales como los literarios de estas páginas son un ejemplo perfecto de la sinceridad, la imaginación y el talento de una de las artistas más importantes del siglo XX.
Antes de que la artista se pasara a producir sus esculturas y sus tótems, Bourgeois había realizado infinidad de grabados tan mágicos como este, que es la placa número 7 de 9 que publicó. La acompañaban pequeños textos, un híbrido entre cuentos infantiles de terror y parábolas semi-autobiográficas. Las emociones eran el material con el que trabajaba Bourgeois, y lo vemos en textos como este:
«Una vez un hombre se enfadó con su esposa, la cortó en pequeños trozos e hizo un guiso con ella. Después llamó a sus amigos y les invitó a una fiesta de cócteles y guiso. Después todos vinieron y pasaron un buen rato».
Es evidente que con este grabado Bourgeois denuncia el maltrato hacia la mujer. Pero también la trivialidad y la complicidad social que suponía ese maltrato en tiempos pasados, la «poca importancia» que se le daba a esos dramas domésticos. Sin renunciar a cierto humor, el texto y el grabado surrealista es un germen de lo que se convertirá en décadas posteriores en el universo bourgeoisiano.
Toda la tendencia de este libro trata sobre la disminución de la autoestima. Es un descenso… un descenso a la depresión. Pero yo creo en la resurrección por la mañana. Esto es un retiro, pero es temporal… Pierdes tu autoestima, pero te levantas de nuevo. Se trata de supervivencia… de la voluntad de sobrevivir.
Louise Bourgeois